¿Por qué algunos alumnos se autoexcluyen y cómo evitarlo?
Somos personas sociales por naturaleza, por lo que ninguna persona que no tenga buenas relaciones sociales va a ser feliz. A una gran mayoría de las personas no les gusta que se ría de ellas, y es más normal aún, encontrar a niños que les pase esto. Pero cuando este temor es demasiado grande como para condicionar sus relaciones con los demás y que afecte en su día a día, podemos hablar de un problema, una fobia social, la cuál va a dar lugar a la autoexclusión social.
¿Qué es la autoexclusión social y cuándo surge?
Hablamos de autoexclusión social, como bien dice la palabra, cuando el niño se autoexcluye, es decir, se aparta de sus compañeros prefiriendo quedarse solo. En muchas ocasiones, esta acción se debe, como hemos estado hablando, se puede encontrar relacionada con el enorme temor que siente el niño de que se rían de él. Esta situación, en la mayor parte de las ocasiones, está producida por los propios sentimientos y pensamientos que se tiene sobre uno mismo.
Esa sensación de querer autoexcluirse, suele aparecer entorno a los 6 años, justo cuando las relaciones entre los amigos comienzan a tener mucha importancia. El niño siente rechazo por sus compañeros o se imagina la existencia de ese rechazo y prefiere alejarse de ellos antes que sentir que se puedan reír de él o que lo aparten.
Como señala el estudio 'Autoconcepto, Autoestima y aprendizaje escolar' para la revista Piscothema, el autoconcepto que los niños tienen de ellos mismos tiene un gran peso en la manera en la que regulan todo lo relacionado con el campo de lo cognitivo y motivacional. Es decir, la autoestima también afecta de una manera directa al aprendizaje niños y, como se observa en esta investigación, a su rendimiento académico.
¿Cómo se manifiesta?
Algunas de las conductas más frecuentes que podemos observar en niños que presenten esta fobia social son, por ejemplo, esa tendencia al aislamiento, a la autoexclusión, tener malo hábitos como chuparse los dedos o morderse las uñas, intentar evitar a toda costa situaciones en la que pueda tener cualquier tipo de interacción con otras personas, suelen tener sentimientos de inferioridad o timidez, una enorme sensación de rechazo o de miedo al mismo, pueden tener pesadillas o episodios de ansiedad, pueden acabar apareciendo problemas alimenticios, tienen una necesidad permanente de que cada cosa que realicen sea aprobada… entre otras muchas.
La importancia de la autoestima
Una clave fundamental en la autoexclusión, es la autoestima que tenga el niño. La autoestima es algo que se construye a lo largo de toda la vida y en la que intervienen factores como las experiencias que se tienen, las expectativas que puede generar de él mismo o de los que lo rodean, la educación, las expectativas que tengan los demás sobre él, la cultura, y las opiniones de todas las personas que conforman su entorno.
3 consejos prácticos para ayudar a los niños a tener buena autoestima
1. Cuidar la manera en la que se les habla
El tono y las palabras que se utilizan han de cuidarse con mucho detalle, pues algunas frases pueden resultar devastadoras para los niños, de manera que pueden ver que sus emociones son invalidadas o transmitirles un mensaje negativo de forma inconsciente. Nuestro lenguaje también es una forma de empoderar a los niños, resaltando sus virtudes y felicitándolos por sus buenas actitudes y comportamientos. Hacerles sentir más fuertes y capaces, e intentar mantenerlos motivados les ayudará a superar los problemas en los que se encuentra y a seguir aprendiendo con una actitud positiva.
2. Dejar que asuman responsabilidades y tareas
Es importante que los niños asuman responsabilidades desde pequeños y dejar que ellos mismos se encarguen de realizar tareas. Cuando los niños se sienten útiles y sienten que han hecho un buen trabajo se valoran más y es buena forma de fomentar su autonomía. Además, hay que ponerles límites, puesto que las normas ayudarán a forjar su personalidad, el saber que se puede y que no se puede hacer es fundamental para que crearles una rutina que les permitan estar seguros, y la seguridad es uno de los pilares de la autoestima. De la misma manera que poner limites es fundamental, es importante dejarles opinar y darles la posibilidad de tomar pequeñas decisiones, que sean conscientes que su opinión es valorable.
3. No comparar a unos niños con otros
Las comparaciones nos hacen sentir mal (incluso a los adultos) porque cuando uno compara, siempre lo hace con algo o alguien "mejor". Hay que saber empatizar y comprender que cada niño tiene sus propias cualidades y ritmos, compararlos puede hacerles sentirse inferiores y cualquier critica o humillación en público está totalmente contraindicada. Es necesario también saber reconocer nuestros propios errores, admitir que nos hemos equivocado frente a los niños, les servirá para saber que nadie es perfecto y les ayudará a valorarse a pesar de sus errores.
¿Cómo podemos erradicarla?
Un papel muy importante, en cuanto a poder evitar la autoexclusión, es a través de la erradicación del acoso escolar. Otras formas que tenemos es procurar un ambiente agradable en el aula, evitar situaciones sociales en las que pueda haber algún tipo de discriminación, fomentar la empatía en todo el alumnado, el compañerismo…
En definitiva, resulta fundamental fomentar el desarrollo de una buena autoestima y la confianza en uno mismo. Podemos llevar medidas a cabo como no poner expectativas demasiado altas en el niño como para que crea que no las va a poder cumplir, hacerlos sentir queridos y aceptados, debemos centrarnos en los puntos fuertes de los niños y no en los malos, enseñar a los niños a cuidarse por ellos mismos, animarlos, etc.
También existen algunas actividades o juegos que podemos llevar a cabo en el aula para un buen desarrollo de la autoestima. Uno de estos juegos es darles un papel en el que ponga el nombre de cada alumno. En la parte de atrás del papel, los niños deberán escribir al menos cinco cosas buenas que encuentren en ellos mismos. El papel se colgará en el aula para que todos puedan recordar siempre lo valiosos que son.
La autoexclusión no es algo que debamos dejar pasar ya que puede llegar a ser muy perjudicial para la persona. Una que se automargina y aprende a estar solo, se siente tan bien que no quiere salir de ahí, pues para qué va a querer correr el riesgo de sentirse excluido o sentir que se están riendo de él cuando solo se encuentra de maravilla. Esta situación puede llevar a padecer problemas de salud, problemas psicológicos e incluso en algunos casos ha llevado al suicidio. Tenemos que ser muy conscientes de lo perjudicial que es y evitarlo o ayudarles a en la mayor medida posible.
Texto escrito por Rocío Cabrera