Aprendiendo en un andamio: el Scaffolding en Educación
Aunque el titular pueda resultar disparatado, que no cunda el pánico, no nos referimos a dar clase subidos en una plataforma ni nada por el estilo, el Scaffolding en Educación, no tiene nada que ver con eso… ¿o quizás sí?
La metodología de andamiaje o Scaffolding consiste en dotar a los alumnos de los recursos o herramientas que les permitan por sí solos resolver los problemas que les surjan en el aula. Por lo tanto, no consiste en ayudar al alumno de forma directa a solventar los ejercicios de clase, sino a dotarlos de instrumentos para que exploren y encuentren sus propias conclusiones.
¿Qué ventajas tiene el Scaffolding en Educación?
La ventaja que tiene esta metodología está en la rapidez y eficiencia con la que los alumnos comprenderán los contenidos nuevos y el desarrollo de habilidades para conseguir soluciones a diferentes problemas.
En línea con este razonamiento, las herramientas que adquieren los alumnos en cuanto al manejo de los recursos facilitados por los docentes servirán no solo para la resolución de un tema concreto, sino que, establece las bases para la resolución de otros en el futuro.
Otra de las ventajas está en la eficiencia en el uso de los recursos y del tiempo por parte de los alumnos de manera que se aminora su nivel de frustración, ya que, el trabajo está estructurado y centrado en la resolución de problemas planteados por los docentes.
¿Qué es la zona de desarrollo próximo (ZDP)?
El concepto de zona de desarrollo próximo se refiere a la distancia entre el nivel real de desarrollo del alumno, es decir, su capacidad para resolver de forma autónoma un problema y el nivel de desarrollo potencial en el caso de haber contado con la ayuda de un adulto u otro compañero.
Consecuentemente, mediante el análisis de esta zona, el rol del docente está en igualar el desarrollo real del alumno con el potencial. En otras palabras, se pretende que el alumno adquiera las habilidades necesarias para no requerir de ayuda de otra persona favoreciendo así su autonomía.
Por lo tanto, el Scaffolding en educación, comienza con una evaluación inicial en la que se determina el nivel de desarrollo del alumno para así adaptar los recursos o herramientas cedidas por los docentes a cada nivel o determinar cuáles serían los más adecuados conforme a su particular ritmo de aprendizaje.
¿Existe el andamiaje colectivo?
El andamiaje o Scaffolding en educación se ha centrado en la individualidad de cada alumno. Ahora bien, existen posiciones teóricas que consideran que el aprendizaje se puede ver reforzado mediante el trabajo colaborativo entre varios alumnos.
El razonamiento que mueve a esta teoría se basa en el apoyo emocional que entre iguales puede producirse durante el proceso de aprendizaje. De manera que, puede ser recomendable realizar actividades entre dos o varios alumnos combinando aquellos con un nivel de desarrollo elevado con otros que no lo sean.
¿Qué tipos de Scaffolding en Educación existen?
En palabras de Dodge (2001) se puede realizar una clasificación basada en el momento en el que se desarrolla el aprendizaje. De esta forma, se trazan las líneas de unas determinadas actividades a realizar conforme a cada caso.
- Andamiaje Receptor: Son guías que pretenden reforzar lo que el docente pretende con la explicación. Algunas de ellas pueden ser gráficos o tablas organizativas.
- Andamiaje Transformador: La finalidad aquí de las actividades es transformar una información facilitada por el docente en algo nuevo. Es decir, fomenta el contraste de información, la comparación o la valoración. Un ejemplo serían los diagramas de Venn o actividades que generen ideas.
- Andamiaje Productivo: El objetivo claro en este andamiaje es la creación por parte de los alumnos de plantillas de presentación, esquemas o guiones.