Afonía
La voz es nuestro principal instrumento de comunicación, además, es única de cada individuo. Esta es el sonido resultante de la vibración de las cuerdas o pliegues vocales al aproximarse entre sí cuando pasa el aire a través de la laringe. Cuando existe una alteración o trastorno de la voz la persona manifiesta dificultad a la hora de intentar producir sonidos para hablar, es común cambios en el tono y calidad de la voz pudiendo sonar velada, ronca, débil o entrecortada.
Este tipo de trastornos de la voz son las llamadas disfonías y afonías. Las disfonías se dan cuando la persona presenta alteraciones en las cualidades de la voz en cuanto al timbre, tono, volumen e intensidad, producidas por un mal uso o abuso de esta o, también, debido a trastornos orgánicos, de ahí que las disfonías se clasifiquen en disfonías orgánicas cuando hay una lesión en la anatomía de los órganos implicados en la fonación, o disfonía funcional cuando no se presenta lesión en dichos órganos.
Centrándonos en las afonías, estas, a diferencia de las disfonías, suponen la pérdida total de la voz, ya sea de manera transitoria o permanente, cuya causa suele ser física o, en menor medida, psíquica debido a trastornos psiquiátricos o cuadros de psicosis.
Dentro de las causas físicas tenemos:
-
Los nódulos vocales que son pequeñas callosidades en las cuerdas vocales que aparecen al ejercer una excesiva presión en ellas. Son característicos de profesionales que usan mucho la voz, tales como cantantes. Estas lesiones en las cuerdas vocales son benignas y suelen remitir con reposo y rehabilitación.
-
La laringitis es uno de los causantes más frecuentes de trastornos de la voz, al inflamarse las cuerdas vocales, normalmente debido a una infección viral de las vías aéreas altas, vibran de forma distinta produciendo alteraciones en la voz o la ausencia de esta en caso graves. La laringitis también puede surgir por un abuso de la voz, mal uso o por tomar irritantes tales como el tabaco o el alcohol.
-
Los pólipos vocales, como los nódulos, son la presencia de tumoraciones benignas en las cuerdas vocales, aunque en este caso solo suelen aparecer en una de ellas nada más. Suelen deberse a un mal uso o uso excesivo de la voz provocando el mismo resulta, alteraciones en las características de la voz o ausencia de esta. En los casos más graves es necesario el tratamiento quirúrgico
-
El reflujo gastroesofágico produce irritación de las cuerdas vocales debido al ácido que asciende desde el estómago, provocando ronquera, molestias al hablar y tragar e incluso ausencia de voz.
-
Otras de las causas muy comunes de la afonía son las complicaciones a nivel quirúrgico, bien al intervenir para extirpar los pólipos o derivadas de una intubación. Al sacar o introducir las herramientas para la intubación, las cuerdas vocales pueden verse dañadas provocando una alteración de la voz o ausencia total de esta.
En relación a lo anteriormente citado, podemos establecer cuatro principales tipos de afonía en función de la causa que la origine:
-
La afonía funcional o psicogénica, en la cual no se presentan lesiones en los órganos intervinientes en la fonación, por lo que suelen deberse a causas psicológicas y cuyo tratamiento indicado es el psicológico y logopédico.
-
La afonía traumática, la principal causa de esta es debida a la intubación orotraqueal en intervenciones quirúrgicas.
-
La afonía orgánica suele darse en personas con alteraciones orgánicas, es decir, daños en las estructuras que intervienen en los órganos de la fonación.
-
La afonía audífona, es la menos común, se da cuando la persona que la presenta tiene alteraciones en sistema auditivo y debido a no percibir la voz tampoco la desarrolla.
Por último, cabe destacar la relevancia de los profesionales de la Logopedia a la hora de intervenir en las afonías, siendo los indicados para llevar a cabo su tratamiento.
Volver al glosario