Altas capacidades
Atendiendo al marco legislativo, la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo (LOMLOE) establece que dentro del Alumnado con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo se encuentran incluidas las altas capacidades. Este término tiene una relación directa con la inteligencia. Por ello, se puede decir que una persona tiene altas capacidades, cuando su coeficiente intelectual se encuentra por encima de 120.
Se podría decir que el coeficiente intelectual (CI) es un número con el que medimos la inteligencia de las personas. Por ello, a través del CI podemos saber si el promedio de una persona es normal, por encima de la media o por debajo. No obstante, no se puede distinguir de manera clara y concreta los distintos tipos de altas capacidades. Aunque los profesionales destacan tres: superdotación, talento y precocidad intelectual.
Tipos de Altas Capacidades
La superdotación se refiere a todas aquellas personas que su coeficiente intelectual está por encima de la media normativa de su edad, en este caso superior a 130.
Con respecto, a los talentos, podemos distinguir dos:
- Talentos Simples: son personas que sobresalen en algún ámbito de la inteligencia, pero en lo demás presentan niveles normales o bajos.
- Talentos Complejos: son personas que destacan en varias áreas o ámbitos específicos de la inteligencia.
La precocidad intelectual hace referencia a un rápido desarrollo temprano que puede o no durar a lo largo del desarrollo.
Intervención Educativa para el alumnado con Altas Capacidades
Tener altas capacidades no significa sacar buenas notas. En la sociedad actual, la mayoría de las personas entienden que un niño tiene altas capacidades, cuando es brillante y destaca en el aula. Pero va más allá, los niños con altas capacidades presentan habilidades cognitivas y aptitudes altas especialmente en la creatividad y en la motivación intrínseca.
En muchos casos, los niños con altas capacidades tienen problemas de aprendizaje o bajo rendimiento académico incluso llegan al fracaso escolar. Esto se debe a que la facilidad que tienen por aprender puede llevar a la apatía, es decir falta de motivación y desinterés por los contenidos que se dan en el aula.
En el art. 76 de la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre “Corresponde a las Administraciones educativas adoptar las medidas necesarias para identificar al alumnado con Altas Capacidades intelectuales y valorar de forma temprana sus necesidades. Asimismo, les corresponde adoptar planes de actuación adecuados a dichas necesidades”.
El proceso de identificación de las altas capacidades es necesario, ya que se tiene que verificar que el alumno cumple una serie de criterios para realizar la evaluación psicopedagógica y poder llegar a una intervención educativa correcta.
Los progenitores, los profesores y el Equipo de Orientación tienen un papel importante. Por ello, detectar que un niño tiene altas capacidades es importante para que el docente y la familia sepa gestionarlo de manera correcta y el niño pueda desarrollar al máximo sus altas capacidades. Para ello, el sistema educativo ha creado los Programas de enriquecimiento curricular, que son medidas para enriquecer las competencias y contenidos curriculares, potenciando las capacidades cognitivas de cada persona. Además, de ampliar con contenidos y materias que no se encuentran dentro del contenido curricular.