Retroalimentación
El término retroalimentación hace referencia a la transmisión de información entre el emisor y el receptor, de manera que se produce un intercambio de la misma con un fin determinado. Esta información logra ser efectiva siempre que sea útil para el receptor. Además, debe proporcionar a los destinatarios información o sugerencias necesarias que contribuyan a la obtención de los resultados deseados. La información proporcionada debe ser constructiva y específica sobre lo que se debe cambiar, mejorar o continuar desempeñando.
Este término está conformado por el prefijo retro, que significa ir hacia atrás o retroceder, y el verbo alimentar, que es nutrir, por ello la palabra al completo hace alusión a la reinserción de información en un mismo sistema o receptor, según el caso, para optimizar su comportamiento y promover el cambio.
En términos dentro de la Psicología, un evento se considera proceso de retroalimentación cuando deriva de un comportamiento del sujeto y posee significado dentro de su gestión cognitiva emocional, facilitando un cambio o una estabilización en el comportamiento de la persona para facilitar la adaptación al medio.
Conocido en inglés bajo el término “Feedback”: dar feedback de forma adecuada es un arte que requiere entrenamiento. Se trata de una habilidad que debe desarrollarse a lo largo de la vida, ya que, todos alguna vez, hemos ofrecido un consejo u opinión a un compañero, familiar, amigo, pareja, etc.
Sin embargo, dominar esta técnica no es sencillo, pues un feedback aplicado inadecuadamente no conseguirá alcanzar ningún beneficio.
Existen dos tipos de Retroalimentación:
Retroalimentación / Feedback Positivo. El feedback positivo hace referencia a algún evento, actitud o conducta que nos ha afectado positivamente. Es importante darlo inmediatamente después de haberse producido este evento. Debe ser real y sin ningún fin de obtener nada, a cambio, se produce sin esperar nada.
Podría hacerse dentro de un contexto público o privado según el momento temporal y hacerlo de manera clara, directa y sin rodeos.
Retroalimentación / Feedback Constructivo. También conocido como feedback negativo. Este tipo de retroalimentación se utiliza para hacer saber a la otra persona que su conducta o palabras nos han hecho sentir mal, o que nos afectan negativamente. Así mismo, podemos utilizarlo con el fin de que la otra persona mejore en algún ámbito de su vida, personal o profesional. En este caso, sí es importante que se dé en un momento oportuno y de manera privada para no ridiculizar a la persona o pueda sentirse juzgado.
Tanto un tipo de retroalimentación u otro, en definitiva, persigue el mismo fin y trata de enriquecer la comunicación social, humana y constructiva, a la hora de establecer un aprendizaje relacionado con diferentes habilidades sociales.