¿Qué es la crianza con apego?

Es fundamental partir de la base de que educar es contribuir de manera positiva al desarrollo integral del individuo, sin embargo, no todos los estilos educativos lo logran.  

La crianza con apego es un estilo educativo que resulta sustancialmente beneficioso para los menores. Se encuentra centrada en el niño y en sus necesidades. Su principal objetivo es crear un vínculo de apego hacia sus cuidadores.  

Este estilo se basa en la teoría de apego de John Bowlby, quien dice que el desarrollo de un niño y su posterior comportamiento, dependerán del primer vínculo que forme con su cuidador. Señalaba que existían distintos tipos de apego en función de ese vínculo creado.

Es por ello, que la crianza con apego en bebés debe estar basada en el amor, el respeto y la dedicación, buscando que la figura de apego promueva estimulación, seguridad y afecto para fomentar que el individuo alcance un desarrollo adecuado.  

¿Qué beneficios ofrece? 

La crianza con apego, tal como veníamos comentando, ofrece numerosos beneficios entre los que podemos destacar:  

• Aumenta su autoestima 
• Se fomenta la seguridad   
• Tienden a ser más positivos y encontrarse más satisfechos 
• Se fomenta la autonomía 
• Se estimula la responsabilidad y la resolución de problemas  
• Presentan relaciones sociales más saludables 

Principios de la crianza con apego  

Existen algunos principios básicos en los que se fundamenta la crianza con apego, que, aunque no deben llevarse a cabo tal cual, y pueden ser interpretados, son una guía de gran utilidad.  

El primero es la preparación tanto al embarazo como al parto. Esto es algo esencial en el ámbito emocional, pero también en el físico. Es muy importante, como figura de apego, informarte y formarte para tener un buen parto, dentro de la medida de lo posible, y actuar, desde el momento del nacimiento, buscando la creación de ese vínculo afectivo lo más temprano posible.  

El segundo es utilizar una alimentación respetuosa. En este sentido, cabe destacar la lactancia materna, el cual es considerado como el mejor alimento ya que no solo es el más completo nutricionalmente, sino que además crea un vínculo que responde ante sus necesidades emocionales. Aunque si esta no se puede llevar a cabo, sea por el motivo que sea, es fundamental promover una alimentación saludable. Para ello, también resulta muy importante enseñar a parar de comer en el momento en el que uno se siente satisfecho.  

Un tercer principio es responder ante las necesidades desde la sensibilidad. Se debe mostrar empatía para generar una mayor confianza. Los castigos no son una buena herramienta a utilizar, sin embargo, esto no quiere decir que no se establezcan límites, sino todo lo contrario. Pero es primordial utilizar la reflexión y enseñar a expresar y gestionar sus ideas y emociones.  

El cuarto principio que encontramos es el contacto físico desde el nacimiento. Ya habremos escuchado en más de una ocasión la importancia que tiene el llamado piel con piel. Y es que esta forma de vincularse ayuda a los recién nacidos a sentirse seguros y ayuda en su estimulación.  

Como quinto principio se destaca la creación de rutinas nocturnas. El sueño es muy importante en todas las edades, pero cuanto más en los recién nacidos. Por ello, se debe propiciar un sueño seguro. Para eso, es necesario atender a todas las necesidades que el pequeño pueda presentar durante la noche. De aquí surge el llamado colecho en el que se pone al recién nacido en un lugar seguro al alcance de sus figuras de apego evitando así cualquier riesgo que se pueda presentar, además de poder responder a esas necesidades que tenga.  

En sexto y último principio, cabe mencionar la disciplina positiva. Como habíamos citado, los castigos no son una buena opción, pero sí se deben poner límites. Para ello, es muy relevante actuar como guía de los pequeños ayudando a fomentar un comportamiento positivo desde el respeto, sin imponer ningún tipo de miedo. En este sentido, es indispensable la comunicación para poder buscar soluciones a los diferentes conflictos y llevar a cabo una correcta actuación, desde el respeto.  

Y aunque estos son tan solo algunos de los principios que sigue este estilo educativo, es necesario tenerlos en cuenta para llevar a cabo una crianza llena de normas, respeto, valores y amor. La crianza con apego se encuentra relacionada con ese vínculo emocional que se establece desde el nacimiento, pero no se forma sola, sino que debemos llevar a cabo determinadas actuaciones para crearla y reforzarla.  

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