Los trastornos del lenguaje en la atención temprana
El lenguaje es una de las capacidades más importantes que tenemos los seres humanos. Nos permite comunicarnos, expresar nuestras ideas, nuestros sentimientos y relacionarnos con nuestros iguales. Por lo tanto, un correcto desarrollo del lenguaje nos permitirá integrarnos adecuadamente en nuestra sociedad. Pero, en ocasiones, pueden aparecer ciertos problemas que harán que no se desarrolle con normalidad. Nos referimos a los trastornos del lenguaje.
Entendemos por trastornos del lenguaje, todas aquellas dificultades ante la compresión del lenguaje, así como en la expresión o repetición de palabras o frases. Estos trastornos del lenguaje, dependiendo del nivel en el que se manifiesten, puede ocasionar serios problemas para la adaptación del sujeto al entorno, así como en su desarrollo escolar.
Principales trastornos del lenguaje
Trastorno del lenguaje. Se trata de un trastorno del neurodesarrollo que afecta a la adquisición y desarrollo del lenguaje oral. Puede afectar tanto al ámbito oral, como a la comprensión del lenguaje. En ocasiones, se puede confundir con un retraso en la adquisición del lenguaje, por lo que es importante estar atentos a las primeras señales para una correcta detección e intervención.
Dislalia. Se trata de un trastorno en el que se desarrollan problemas en el lenguaje oral. Dichos problemas vienen determinados por problemas en la articulación, haciendo el lenguaje poco comprensible ya que no puede emitir de forma correcta determinados sonidos. Esto ocasiona problemas de adaptación a la sociedad y de relaciones entre iguales.
Disartria. Dentro de los trastornos del lenguaje, se refiere a la dificultad de la articulación del lenguaje que ha sido producida por una alteración cerebral o situada en las fibras nerviosas.
Disfemia. También conocido como trastorno de la fluidez o tartamudez. El principal problema de los niños y niñas con este tipo de trastorno es la falta de fluidez con la que se produce el habla, problema que puede verse aumentada en público.
Dislexia. Se trata de un trastorno del lenguaje escrito. La niña o el niño pueden presentar problemas para leer o para comprender algún texto. Se pueden realizar omisiones de letras o traslaciones, lo cual dificultad la comprensión de un texto e influir de forma negativa en su desarrollo académico.
Disgrafia. Las personas afectadas por la disgrafia presentan problemas a la hora de generar palabras, letras o frases. Presentan problemas para deletrear, para expresarse de forma escrita o problemas para entender las reglas de ortografía.
Esto son solo algunos de los principales trastornos del lenguaje que nos podemos encontrar en la infancia. Pero lo esencial ante cualquiera de dichos trastornos es la detección precoz. De ahí, la importancia del buen funcionamiento de la Atención Temprana. Desde los primeros meses de vida, debemos estimular a los bebés ya que, en la etapa prelingüística (cuando aún no han dicho su primera palabra) ya se comunican con su entorno a través de gestos, miradas o sonrisas.
De este modo, desde casa podemos fomentar esa comunicación y favorecer el desarrollo del lenguaje puede ser con actos tan cotidianos y sencillos como contar cuentos, cantar canciones, poesías o trabajar con rimas. Así como también podemos apoyarnos en elementos visuales como libros infantiles o canciones con pictogramas.
La labor de los logopedas en el campo de la atención temprana es esencial para el correo desarrollo del lenguaje. No olvidemos que el lenguaje es nuestra herramienta básica para desenvolvernos de forma adecuada en la sociedad y evitar futuros problemas de adaptación curricular.
De este modo, una especialización de un máster oficial universitario en atención temprana garantizará una correcta y temprana detección de necesidades para, de este modo, comenzar con una correcta intervención) en la etapa peri lingüística que consiga los objetivos del desarrollo integral de la niña o el niño.