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Cómo usar los instrumentos de evaluación LOMLOE en el aula

Instrumentos de evaluación LOMLOE en el aula
Rocio Cabrera

Rocio Cabrera

Mar, 11/02/2025 - 15:13

La evaluación es uno de los pilares fundamentales del proceso de enseñanza-aprendizaje. La Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica. De 3 de mayo, de Educación (LOMLOE) establece un enfoque más competencial, lo que implica modificar los procedimientos de evaluación para valorar de manera integral las habilidades, conocimientos y actitudes del alumnado. Este enfoque requiere que los docentes adapten sus prácticas, utilizando instrumentos, herramientas y técnicas de evaluación alineadas con los estándares de aprendizaje.

¿Qué son los instrumentos de evaluación según la LOMLOE?

Los instrumentos de evaluación son los medios específicos que se utilizan para recoger evidencias del aprendizaje. Estos difieren de las herramientas de evaluación, ya que estas últimas se refieren a los recursos o materiales de apoyo, como rúbricas, listas de cotejo o escalas de valoración. Por ejemplo, mientras que una rúbrica es una herramienta, un cuestionario o una observación estructurada son instrumentos. Esta distinción es importante para garantizar coherencia en la planificación y ejecución de los procedimientos de evaluación.

Las técnicas de evaluación, por su parte, son las estrategias o procedimientos que permiten obtener información sobre el proceso de aprendizaje. La observación, la entrevista, el trabajo colaborativo o la autoevaluación son algunas de estas técnicas. Sin embargo, los instrumentos se refieren al formato en el que se registran las evidencias de dichas técnicas. Por ejemplo, la observación directa puede realizarse mediante listas de cotejo o escalas de observación. Las pruebas escritas se documentan a través de cuestionarios o exámenes. La evaluación de trabajos prácticos se registra mediante portafolios o proyectos, y la autoevaluación o coevaluación se organiza a través de cuestionarios o diarios de aprendizaje. Este enfoque permite valorar tanto los resultados como el proceso seguido, dando lugar a una evaluación más diversificada.

Estándares de aprendizaje y competencias en la LOMLOE

La LOMLOE establece cambios importantes en la evaluación, priorizando el desarrollo de competencias clave. Aunque los estándares de aprendizaje ya no se presentan de manera rígida, continúan orientando los criterios de evaluación. Por ejemplo, un estándar en primaria podría ser "comunica, de forma oral y escrita, los resultados de un experimento utilizando vocabulario científico adecuado". Este tipo de referencia ayuda al docente a definir qué evidencias deben recogerse para verificar el progreso en el aprendizaje. Los instrumentos utilizados deben facilitar la objetividad en el registro del desarrollo competencial, promoviendo una relación coherente entre criterios, evidencias e instrumentos de evaluación.

Instrumentos de evaluación en las etapas educativas

En función de la etapa educativa, los instrumentos de evaluación se adaptan a las características y necesidades del alumnado. En Educación Infantil, la evaluación es cualitativa y basada en la observación continua. Se pretende registrar el desarrollo en áreas como la autonomía, la interacción social y el crecimiento emocional y motor. En Educación Primaria, se pretenden evaluar tanto los conocimientos adquiridos como el desarrollo de habilidades sociales y comunicativas, por lo que se hace uso de pruebas objetivas. En la etapa de Secundaria y Bachillerato, la evaluación se enfoca en la capacidad de análisis crítico, la autonomía y la transferencia de conocimientos a diferentes contextos. Los instrumentos más comunes son aquellos que consiguen valorar el trabajo en equipo y las competencias digitales.

Cómo seleccionar y aplicar los instrumentos de evaluación

Al seleccionar los instrumentos de evaluación es esencial considerar algunos aspectos fundamentales. La pertinencia asegura que el instrumento esté alineado con los objetivos de aprendizaje y los criterios de evaluación establecidos. La fiabilidad garantiza que las evidencias recogidas sean consistentes y reproducibles. La validez se refiere a que el instrumento debe medir aquello que se pretende evaluar, evitando sesgos o ambigüedades. Además, es importante utilizar una diversidad de instrumentos para obtener una evaluación más integral y equilibrada.

Un ejemplo de aplicación práctica puede darse en una situación de aprendizaje interdisciplinar en secundaria, donde el alumnado desarrolla un proyecto de investigación sobre sostenibilidad ambiental. En este caso, se podrían combinar varios instrumentos de evaluación. Esa diversidad de instrumentos proporcionaría una visión más completa y objetiva del desarrollo de competencias clave.

Atención a la diversidad y evaluación inclusiva

La LOMLOE también refuerza la necesidad de atender a la diversidad en el proceso evaluativo, fomentando una evaluación inclusiva. Esto implica diseñar instrumentos que permitan recoger evidencias del aprendizaje de todo el alumnado, independientemente de sus capacidades o circunstancias personales. Los principios del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) proponen ofrecer múltiples formas de representación, expresión y compromiso. Por ejemplo, en lugar de realizar una única prueba escrita, se podría permitir elegir entre varias opciones, como una presentación multimedia o una exposición oral. Esta flexibilidad promueve la participación activa y favorece el acceso igualitario al aprendizaje.

La evaluación en el marco de la LOMLOE requiere, por tanto, un cambio profundo en las prácticas docentes. No se trata únicamente de recoger evidencias, sino también de analizarlas e interpretarlas para mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje. Los instrumentos de evaluación son esenciales para registrar de manera objetiva los logros y progresos. Un uso adecuado y diversificado de estos instrumentos permite no solo valorar los resultados, sino también estimular aprendizajes significativos, inclusivos y competenciales. Por ello, es fundamental que los docentes reciban formación continua en el diseño y aplicación de procedimientos de evaluación eficaces, adaptados a las necesidades de cada etapa educativa.

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