Enseñar música con el método Kodály

El método Kodály es un enfoque educativo diseñado para enseñar música de forma accesible y efectiva, especialmente para niños. Fue desarrollado por el compositor y pedagogo húngaro Zoltán Kodály en la primera mitad del siglo XX. Este método se basa en la idea de que la música es un derecho de todos y debe ser parte integral de la educación desde una edad temprana.

Principios del método Kodály

El Método Kodály se rige por unos principios fundamentales:

• Música para todos. Kodály creía que todos los niños tienen derecho a una educación musical de calidad. Según él, la música debe ser accesible para todos, no solo para aquellos que muestran un talento excepcional. 

• Educación temprana. El método enfatiza la importancia de comenzar la educación musical desde la infancia, ya que los niños son especialmente receptivos al aprendizaje musical en sus primeros años de vida. 

• Aprendizaje a través de la voz. La voz humana es el primer y más accesible instrumento musical. El canto es fundamental en el método Kodály, ya que se considera la manera más natural de experimentar y aprender música. 

• Repertorio de calidad. Kodály promovió el uso de música folclórica y de alta calidad en la enseñanza, argumentando que los niños deben estar expuestos a un repertorio rico y culturalmente relevante. 

• Enseñanza secuencial. El método sigue una progresión lógica y gradual, donde los conceptos se introducen de manera secuencial y se construyen sobre lo aprendido previamente. 

• Desarrollo de la audición interna. Se fomenta la capacidad de imaginar y comprender la música internamente antes de tocarla o cantarla, lo cual es esencial para el desarrollo de la musicalidad. 

¿Qué técnicas y actividades podemos desarrollar con este método?  

La primera de ellas es el canto de canciones folclóricas.  

Los niños aprenden canciones folclóricas tradicionales, que son simples y melodiosas. Estas canciones ayudan a desarrollar el sentido rítmico y melódico. 

Otra, el uso de la escala pentatónica.  

Se comienza con la escala pentatónica (do-re-mi-sol-la), que es simple y fácil de cantar. A medida que los niños avanzan, se introducen otras escalas. 

Solfeo y notación musical. 

El solfeo es central en el método Kodály. Se utiliza un sistema de manosignos (conocido como Curwen hand signs) que representa las notas musicales y ayuda a los niños a visualizar y sentir la relación entre las notas. 

El ritmo y clapping. 

Se enseña a los niños a leer y escribir ritmos utilizando palabras rítmicas y patrones de palmadas. Por ejemplo, "ta" para un pulso y "ti-ti" para dos pulsos rápidos. 

Juego y movimiento. 

Se integran juegos rítmicos y actividades de movimiento para hacer el aprendizaje más divertido y activo. Por ejemplo, juegos de imitación, donde los niños repiten ritmos o melodías. 

Entrenamiento auditivo. 

Se realizan ejercicios de audición para desarrollar la capacidad de reconocer y reproducir melodías y ritmos, tanto internamente como a través del canto. 

Dictado musical. 

Los niños practican escribiendo la música que escuchan, lo cual refuerza su comprensión de la notación musical y la teoría. 

Y, por último, cánones y rondas. 

Cantar en rondas o cánones ayuda a desarrollar el sentido de la armonía y la coordinación rítmica, además de ser una actividad divertida y colaborativa. 

Ejemplo de Secuencia de una Clase de Música con el Método Kodály. 

1. Calentamiento vocal: Los niños comienzan la clase con ejercicios de calentamiento vocal y solfeo utilizando los signos manuales. 

2. Canto de una canción folclórica: Se introduce una canción nueva o se repasa una canción previamente aprendida. Se exploran los aspectos melódicos y rítmicos de la canción. 

3. Actividades rítmicas: Los niños practican ritmos a través de palmadas o instrumentos de percusión, utilizando las palabras rítmicas aprendidas. 

4. Ejercicio de solfeo: Se trabaja en el reconocimiento y la entonación de notas utilizando los signos manuales y se refuerzan los conceptos aprendidos. 

5. Juego musical: Se incorpora un juego que refuerce lo aprendido en la clase, como un juego de preguntas y respuestas musicales o un juego de imitación. 

6. Cierre: Se concluye la clase con un breve repaso y un canto final. 

El método Kodály es muy efectivo porque utiliza herramientas pedagógicas que son naturales y accesibles para los niños, ayudándolos a desarrollar sus habilidades musicales de manera gradual y disfrutable.