Coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación

Actualmente, la evaluación tiene gran relevancia dentro de nuestro sistema educativo y su modelo está en evolución constante. Un ejemplo de ello son los nuevos tipos de evaluación: coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación. Un modelo tradicionalista que evalúa únicamente el aprendizaje memorístico y que otorga solo al profesor la facultad y responsabilidad de evaluar, se está quedando muy atrás. 

La evaluación

La evaluación debe ser entendida como un proceso de adquisición de competencias, destrezas, conocimientos, habilidades, valores, así como debe ofrecer al alumnado una visión de cuál es su punto de partida y tras un trabajo donde haya tenido que investigar, buscar, resolver, entender, etc., cual es su evolución. 

Para entender correctamente el término de evaluación es necesaria una aproximación terminológica. La evaluación es la valoración -dar valor- que se lleva a cabo, a partir de la observación y análisis de los datos. Puede ser del proceso de aprendizaje con el fin de tomar decisiones orientadas a mejorar el trabajo y ayudar a progresar (evaluación para el aprendizaje y como aprendizaje), o de la consecución de unos objetivos o del nivel de dominio en el uso de la lengua, con el fin de llevar a cabo un juicio o una calificación (evaluación del aprendizaje). Las nuevas tendencias como la coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación son una ampliación de la evaluación tomando diferentes formas de evaluación.

Tipos de modelo de evaluación

Además no existe un único modelo de evaluación, esta difiere según el momento en el que se realice, por ello encontramos variaciones de evaluación como: 

• Evaluación inicial: tiene por objetivo obtener un conocimiento del marco general en el que tendrá lugar la acción docente. 
• Evaluación formativa: se trata de un proceso de evaluación continua. Esta evaluación nos permite conocer qué, cómo, cuándo y cuánto está aprendiendo el alumnado, lo que nos ofrece la posibilidad de ir regulando las estrategias, recursos y actividades para obtener mejores resultados.
• Evaluación sumativa: consiste en establecer unos balances que sean fiables de los resultados finales que se han obtenido del proceso de enseñanza-aprendizaje. La evaluación sumativa es un tipo de evaluación mucho más formal y se centra en los resultados obtenidos y en demostrar lo que se ha aprendido.

Nuevas formas de evaluación

La evaluación ha pasado de un enfoque solo en la figura del docente a abrir horizonte hacia los alumnos, las familias, y otros miembros de la comunidad educativa. La coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación son un ejemplo del cambio en la evaluación. 

Asimismo existen nuevos procedimientos de evaluación, distinguiendo así entre:

Coevaluación

También llamada evaluación entre iguales. Al trabajar de forma cooperativa y grupal los compañeros tienen una visión de nosotros distinta, de nuestro trabajo y se puede aprender mucho escuchando la evaluación que pueden aportar sobre nuestro trabajo. 

Dentro de la coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación, la coevaluación se puede enfocar como una estrategia didáctica dirigida a aportar dinamismo a la clase y evitar la desmotivación que sienta el alumno en algunos momentos del curso. 

Autoevaluación

El propósito de dicha evaluación es que el alumnado tome conciencia de su propio proceso de aprendizaje, así como se responsabilice de él. Al autoevaluarse tiene que ser crítico consigo mismo, con su actitud, esfuerzo, sus logros, sus posibles fracasos. Es una forma además de autoconocimiento de sí mismo y de sus capacidades y sus limitaciones. 

Se enseña al alumno a tomar conciencia de su aprendizaje. Si se plantea de manera objetiva y formal, puede llegar a ser un método motivador para el alumno y emplearse en la mayoría de las asignaturas. 

Heteroevaluación

Esta evaluación es muy interesante ya que hace referencia a aquellos procesos de evaluación realizados por personas distintas al estudiante o sus iguales, es decir, pueden entrar a evaluar las familias, otro profesorado y otros agentes externos. Respecto a los modelos educativos, coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación, este último destaca por ser el más innovador y motivador para el alumno. 

Es un modelo de educación alternativo, donde diferentes agentes pertenecientes a la comunidad educativa puedan entrar en el aula y formar parte de la vida del centro. Es muy útil en un tipo de metodología activa de enseñanza como puede ser el aprendizaje servicio. 

Actualmente, las relaciones entre la escuela y la familia son vistas como un factor de gran importancia en la educación del alumnado. Sintetizando, de entre los argumentos a favor de la implicación de las familias, destacaríamos:

La participación de los progenitores tiene efectos positivos sobre los resultados escolares y sobre el comportamiento de los menores aumentando la probabilidad de que el alumno pueda progresar en sus aprendizajes y sus actitudes.

Reflexión de la coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación

En definitiva, la evaluación es una etapa vital del proceso de enseñanza-aprendizaje y va a influir de forma determinante sobre qué aprende el alumnado y cómo adquiere conocimientos y cuál es su motivación. La coevaluación, autoevaluación y heteroevaluación supone una forma de dejar atrás esa tradición de dejar caer todo el peso de evaluar en el docente. Por ello, se debe promover la utilización en estos distintos modelos evaluativos en centros educativos para conseguir que el alumnado desarrolle un aprendizaje integral y significativo.

Texto escrito por Anabel Quesada