Actividades para fomentar la lectoescritura

La lectura y la escritura son la base de la educación. Son muchos los sistemas y métodos que existen con el fin de enseñar a leer y a escribir en los primeros años de vida a los niños y niñas, pero es esencial sea el que sea el que finalmente se lleve a cabo partir de las necesidades particularidades de cada uno de los niños y adaptarnos a su ritmo de aprendizaje para así evitar posibles dificultades futuras en la lectoescritura.

En el caso en el que se detecte algún problema en el desarrollo de la lectoescritura, como la dislexia, es esencial intentar acatarlo cuanto antes. Por lo tanto, podemos realizar pequeñas actividades en casa o en clase que permitan mejorar al alumno sus capacidades de lectoescritura, lo importante es escoger aquellas actividades que se adapten a las necesidades particulares de cada uno de los niños y niñas y llevarlas a cabo de manera lúdica para que así puedan disfrutar aprendiendo y se involucren en su propio proceso de aprendizaje. 

Actividades que fomentan la lectoescritura

Algunas de las actividades que podemos llevar a cabo para fomentar la lectoescritura son:

1. Creación de historias. Podemos enseñarle a los niños y niñas una imagen concreta o un dibujo, y a partir de ahí que sean ellos los encargados de crear una historia con aquello que les sugiera la imagen o el dibujo. 
2. Rincón de las letras. Se trata de un rincón que estará lleno de letras de juguete, pudiendo ser piezas pequeñas o bien más grandes de gomaespuma. Lo ideal es que les dejemos experimentar y que ellos mismos creen su propio juego. 
3. Busca palabras con sonidos determinados. Les enseñamos un sonido concreto, como por ejemplo “re”. Les pediremos que busquen palabras que tengan incluido ese sonido.
4. La búsqueda del tesoro. Les daremos una serie de pistas escritas que deberán interpretar y comprender para llegar al tesoro que les estará esperando. Es un juego muy divertido y que se puede adaptar con mucha facilidad al nivel y a la edad de los niños. 
5. Gifling. Se trata de un método de entrenamiento lector por medio de las TIC. A través de ella también podemos detectar precozmente dificultades de lectura, y está también preparada para practicar y fomentar esta habilidad.
6. Conectados. Partiendo de un cuento, se va iniciando progresivamente el aprendizaje de cada letra en el que los niños y niñas podrán experimentar a través de juegos, material manipulativo y recursos que estimulan todos los sentidos. Esta web además se adapta a los distintos ritmos de aprendizaje, por lo que podemos crear y trabajar adaptándonos a las necesidades de cada uno de los niños. 

Beneficios de practicar la lectoescritura

La práctica de la lectoescritura en niños ofrece beneficios significativos para su desarrollo integral. A través de la lectura, los niños mejoran su vocabulario, desarrollan habilidades gramaticales y estimulan áreas cerebrales asociadas con la cognición y la memoria. Además, la exposición a la escritura contribuye al entendimiento de las reglas gramaticales y a la formación de estructuras de oraciones.

La lectura de historias fomenta la imaginación y la creatividad, permitiendo a los niños sumergirse en mundos ficticios y expresar sus propias ideas a través de la escritura creativa. Estas actividades también tienen un impacto positivo en las habilidades sociales y emocionales, promoviendo la empatía a través de la identificación con personajes diversos.

La práctica de la lectoescritura no solo mejora las habilidades comunicativas, sino que también se convierte en una herramienta para expresar emociones y pensamientos. En conjunto, estos beneficios contribuyen a un desarrollo cognitivo completo y sientan las bases para el éxito académico y personal a lo largo de la vida de los niños.

¿A qué edad empezar?

El fomento de la lectoescritura puede comenzar desde la infancia, pues leer en voz alta a los bebés crea asociaciones positivas con los libros. A medida que los niños crecen, se pueden introducir libros interactivos y actividades que fomenten la conciencia fonética.

Durante los primeros años escolares, se puede fomentar la lectura independiente y la escritura creativa. Es esencial adaptar las prácticas al desarrollo individual del niño, alentando un ambiente positivo y divertido alrededor de la lectura y la escritura. Por ende, iniciar temprano establece las bases para el amor por la lectura y las habilidades lingüísticas cruciales en el futuro.

Como vemos, son muchos los juegos, ya sean más tradicionales o digitales, con los que podemos trabajar y fomentar el desarrollo lector y con los que podemos trabajar fácilmente tanto desde el aula como desde casa y a cualquier edad. No solo esto, sino que los beneficios de practicar la lectoescritura son suficientes para animarnos a dedicarle tiempo a esta actividad junto a los más pequeños.

Texto escrito por Pepe López López.