Art thinking: creatividad y pensamiento artístico para la innovación
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La creatividad ha dado el paso de ser una herramienta educativa, sino también una forma de pensar y abordar los desafíos. Art Thinking se alza como una nueva forma de enseñar a través del arte, donde el proceso creativo se convierte en el eje del conocimiento. No se ciñe en el error, sino que lo convierte en una oportunidad para descubrir y valora la imaginación, al igual que válida que la razón. Este enfoque busca inspirar, hacer pensar, sentir y construir el conocimiento de manera libre y significativa. ¡Conozcamos en profundidad de qué trata el Art Thinking!
Introducción al Art Thinking: una nueva forma de aprender
Las investigadoras y docentes universitarias María Acaso y Clara Megías fueron las creadoras de esta corriente de metodología pedagógica. La idea surgió de buscar una solución a la problemática de la educación actual, transformándola a través de la curiosidad, la duda, la indagación y el descubrimiento. La finalidad es usar el arte para generar placer a la hora de aprender en el aula.
Se trata de una metodología educativa cuyas raíces surgen del ámbito cultural y artístico. Si lo comparamos con el Design Thinking, con un objetivo centrado en resolver problemas de manera funcional y práctica, el Art Thinking se enfoca en la creación y la exploración, sin tener un objetivo predefinido. Este método de enseñanza surge por la necesidad de unir el arte y la cultura en el ámbito educativo y así explicar las distintas disciplinas (historia, matemáticas o lengua) a través del arte.
¿Cuáles son sus pilares básicos?
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El arte despierta la curiosidad: Al enfrentarse a una obra de arte, el espectador se ve impulsado a reflexionar, interpretar y construir su propio significado, lo que lo lleva a cuestionar lo establecido y desarrollar pensamiento crítico.
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Aprender con disfrute: Incorporar el arte en el aula o en casa significa que docentes y familias crean experiencias creativas que transforman el aprendizaje en algo dinámico y placentero, fomentando la motivación y la conexión emocional con el conocimiento.
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Generadores de saber: Tanto estudiantes como docentes no solo reciben y transmiten información, sino que la construyen activamente. Al desarrollar sus propias creaciones, fortalecen su comprensión y ganan confianza en su capacidad de aportar nuevas ideas.
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Colaboración y creación conjunta: En el arte contemporáneo, el trabajo en equipo es clave. Desde esta perspectiva, el Art Thinking promueve el aprendizaje colaborativo, la empatía y la expresión emocional a través de proyectos compartidos.
Un complemento ideal a la educación STEAM
Las asignaturas en la educación STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas) suponen un impacto en la enseñanza gracias a la combinación entre la creatividad artística y la rigurosidad científica. Por ello, aplicar la metodología del Art Thinking en la educación STEAM va a permitir al alumnado aprender a enfrentarse a los futuros cambios desde la innovación y la creatividad.
El papel del docente en el Art Thinking
Es importante que los docentes aprendan a guiar a los estudiantes en el Art Thinking: a seguir el proceso creativo, a integrar lo artístico en todas las disciplinas y a promover la reflexión crítica. Esta metodología enriquece la educación STEAM y, por tanto, prepara a los docentes para los desafíos del futuro.
En el enfoque del Art Thinking, el docente deja de ser un simple transmisor de conocimientos para convertirse en un apoyo del proceso creativo. Su rol es inspirar, guiar y motivar a los estudiantes a explorar, cuestionar y construir su propio aprendizaje a través del arte.
Además, el docente en Art Thinking debe cultivar una mentalidad abierta y flexible, capaz de adaptarse a los intereses y ritmos de aprendizaje de los estudiantes. Su objetivo no es solo desarrollar habilidades artísticas, sino potenciar la creatividad, el pensamiento crítico y la capacidad de innovar en cualquier ámbito.
Beneficios del Art Thinking en el aula
Implantar las estrategias del Art Thinking en clase proporciona una serie de beneficios como los siguientes:
- Se adapta a todas las disciplinas, desde las ciencias hasta las humanidades, enriqueciendo siempre el proceso de aprendizaje.
- Desarrolla el pensamiento crítico: no fijar un objetivo concreto permite al alumnado aprender y reflexionar sobre la realidad.
- Mejora el trabajo en equipo: algo tan importante que les será útil en el futuro. Se compone de actividades colectivas donde fomentan el trabajo colaborativo y la comunicación entre todos.
- Promueve la creatividad: gracias al Art Thinking, pueden desarrollar su imaginación sin barreras.
Tras aprender qué es el Art Thinking y su significado en la enseñanza, podemos decir que no solo transforma la manera de enseñar, sino que abre caminos para imaginar, crear y aprender sin límites.